UNA INVITACIÓN

.
Te invito a una noche a mi lado.
Te invito a quererme sin causa aparente,
a perderte entre las sombras y adivinar las formas de mi cuerpo.
Si te quedaras con ganas de más,
te invito a encontrar la melodía que te lleve hasta mis entrañas,
a hechizarte entre mis susurros y mis espasmos.
Y si después, necesitas saborear nuevas texturas,
te invito a que te quedes.
Con tus alas y mis caricias.
Te propongo jugar a querernos, a buscarnos.
A olernos, a robarnos abrazos insistentemente.
A encontrarnos o no.
Ahora frío, ahora templado,
hasta abrasarte en ese recodo al que nadie llegó.
Es una invitación sin ánimo de lucro,
ni pretensiones importantes,
No es proposición, ni promesa,
Tampoco obsesión, ni locura.
Es simplemente un ofrecimiento,
mi sonrisa para jugar con tu melancolía.
mi esperanza para ahogar tus miedos,
mi ser para soñar despierto,
mi locura para vivir con pasión desenfrenada,
mis miedos para sufrir con dolor desmedido,
mi piel para sentirte hombre.
Más si no puedes o, simplemente, no quieres saltar,
entonces te invito a que me pienses y me sueñes.
Y así, cuando la luz de la mañana ilumine
el reflejo de tu rostro agotado,
sepas, que, quizá por miedo,
quizá por desidia, rechazaste la única invitación
a abrazar,
a reír,
a luchar y cambiar lo inamovible.
No la pierdas, nunca se sabe...
El camino es largo y pedregoso.
Puede que algún día,
en ese encorsetado mundo tuyo,
seas capaz de amar un imposible
y seas feliz recordándome,
o desgraciado imaginándome.

Comentarios