Siempre hay un motivo para emocionar, no tiene que ser un día especial, no estás obligado a vivir un acontecimiento. La ocasión eres tú, tu manera de afrontar tu vida, de levantarte cada mañana y creer en tí, mirarte en el espejo y aceptarte tal y como eres, esforzarte por ser mejor persona, por gustarte cada día más, por dentro y por fuera, por querer tu vida, reírte de lo que te ha tocado vivir, emocianarte con cualquier nimiedad, un pájaro, un paisaje, un claro de luna, una sonrisa, unos ojos llenos de dulzura, una confidencia.....disfrutar de esa ópera, esa canción, una letra con muchos recuerdos, sentimientos olvidados.
Necesitar llorar de emoción, imaginar aquel viaje maravilloso, pero también asentar los pies en la tierra, bajar de esa estrella y luchar por tus sueños , porque éstos, sueños son y tan sólo vivirán en tu imaginación.
Por tanto, hay que ser valiente para viajar a esa luna, amasar una fortuna de quimeras y aterrizar con ellas en la tierra convirtiéndolas en realidades. Necesitas creer en ti mismo, en tus valores, en tus capacidades, no te dejes infravalorar con buenos propósitos, nadie es irreemplazable, es hora de que comiences a volar solo, a desarrollar tus ambiciones.
Ansiar las quimeras es deshacer el camino andado y nadar en aguas turbulentas para llegar a un remanso de paz. Codiciar una esperanza es aspirar un deseo y convertirlo en tu presente, luchar para aceptarlo, trabajar duro para vivirlo.
Que nadie te cuente cómo sentir, cómo pensar. Que nadie te imponga sus principios. Que nadie te obligue a pelear en sus guerras, encañonar sus armas, vivir sus vidas, anhelar sus esperanzas.
El amor verdadero es incondicional, surrealista, sin pies ni cabeza.
La pasión es el conocimiento de la esencia del otro, es abnegación, entrega, locura, rabia, llanto, impotencia, solidaridad, sentimiento incontrolado, desapego y respeto por la parcela privada de cada uno.
El cariño es confianza, respeto a ese trocito de corazón personal e intransferible, en el que solo tiene cabida uno mismo.
Confundimos amar apasionadamente con encarcelar los sentimientos, y esta desorientación no deja fluir nuestros anhelos mas profundos. Solemos capturar las vidas de los que amamos y hacerlas nuestras.
Pero este sentimiento no es amor, es simplemente posesión de otra vida, dependencia de otro cuerpo.
El amor verdadero es desapego, es desear con todas tus fuerzas y por encima del sentimiento, permitir volar.
Es liberar los sentimientos y con total naturalidad, hacerlos tuyos.
Un abrazo espontáneo, una caricia atrevida y que el libre albedrío conduzca a dos voluntades a encontrar un solo cauce. Sin ataduras, sin fisuras, sin presunciones, sin distancias. No existen envidias por quién da mas y quién recibe menos. No hay más listos ni más tontos. Ni existen celos, ni venganza.
Cuando seas capaz de renunciar a una vida. Cuando tu última motivación sea tu felicidad y busques y encuentres a ese espíritu que esperas hace tantos sueños, ten cuidado. Que no sea demasiado tarde.Anda. Da el primer paso y continúa sin parar, sin mirar atrás. Es preferible vivir un encuentro, que encontraros en un paraíso invisible sin calor, ni aromas, ni suspiros, ni pasiones, ni desencantos.Sin duda, yo elegiría ese pacto sin firmar, vivir y equivocarme que soñar sin sentir.
Comentarios
te quiero
Besos
y muchossss
Ayer me fui a dormir con este texto y terminé el día con una sonrisa, hoy me levanto otra vez con él y vuelvo a sonreír. Creo que nunca podré agradecerte lo suficiente todo lo que das, el cariño y la calidez que llevas en los ojos y que ha heredado tu hija también (pero no se lo digas que se viene arriba jajajaja)
Un abrazo grande
besos
es un privilegio tenerte en mi vida. y, por Sandra, tranquilo que el secreto no saldrá de aquí. jajajaj
muchos besos para tí, poeta y artista.