EL ESPEJO DE MI ALMA

El espejo del alma


Tengo por cara un espejo
En el que se mira mi alma
Y tan extraño me veo…
Qué ni conozco mi cara.
Que no es espejo de nada.
M.B.C


La picaresca del engaño consiste en simular las intenciones de mi reflejo exterior, de fingir una alegría que no siento, una seguridad de la que carezco. Consiste en fantasear con mi conciencia hasta llegar a la cordura del disparate. Dibujar la caricatura de una sonrisa mientras en el espejo de mi alma tan solo vislumbro el solitario reflejo de dos lágrimas. Tan solo son un par de lágrimas indolentes. Una de impotencia. La otra, de anhelos inconfesables, pero suficientes para organizar la defensa. Comienzo por la retaguardia, cubriendo mi espejo con una sábana blanca. Después, continuo por los flancos y con el mismo escudo níveo me protego de pensamientos sin voz, sin ecos que repiten lo inconfesable. Tras luchas fugaces y contiendas extremas, la sábana aguanta en su lugar, protectora de controvertidas polémicas, la que mas miedos suaviza, capaz de aportar paz, aliviar sentimientos de culpabilidad, ablandar el muro de piedra erigido sobre el basamento de mi cobardía.
¡Espejo opaco de mi alma! donde se emperezaban los cuerpos más bellos, donde el sol sonreía sin atreverse a entrar. El lugar de nunca jamás donde pude ser feliz y llorar y bailar, el mismo lugar donde otros tan solo sintieron la soledad del poderoso. El lugar perdido, ocupado, ayer y hoy, por otros reflejos que cultivan otras flores, o quizá no cultiven ninguna, que sentirán con distintos corazones y tendrán otra manera de amar y ser amados.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Espero que ese espejo comience a reflejar cosas diferentes porque, a pesar de todo, son hay muchas razones por las que ser feliz.

Te quiero Mamá
Historias entre Fogones ha dicho que…
yo tambien lo espero. TQ!